Los requerimientos
para el pecado y la santidad
De Steve Grochow
Isaías 7:14-16: "Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emanuel. Comerá mantequilla y miel, hasta que sepa desechar lo malo y escoger lo bueno. Porque antes que el niño sepa desechar lo malo y escoger lo bueno, la tierra de los dos reyes que tú temes será abandonada" RVR1960.
Isaías 7:14-16: "Por tanto, el Señor mismo os dará una señal: He aquí, una virgen[a] concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel. Comerá cuajada y miel hasta que sepa lo suficiente para desechar lo malo y escoger lo bueno. Porque antes que el niño sepa desechar lo malo y escoger lo bueno, será abandonada la tierra cuyos dos reyes tú temes" LBLA.
Este pasaje señala dos cosas que se necesitan antes de que el pecado y la santidad puedan existir:
1. Conocimiento.
2. Libre albedrío y habilidad para tomar una decisión moral.
Atributos naturales versus atributos morales.
Un ejemplo de un atributo natural es el hecho de que el agua contiene oxígeno. Sin él, el agua no puede existir. Ésta no tiene ninguna elección libre para que contenga oxígeno, ni tampoco virtud moral. Contiene oxígeno por una ley de la necesidad.
El pecado es un atributo moral. Para que existan lo bueno y malo, o el pecado y la santidad, tiene que haber una elección libre de por lo menos dos cosas. El pecado no puede existir sin la verdadera libertad de la voluntad.
Toma algo de conocimiento para poder rehusar el mal y escoger el bien, pero el conocimiento solo no es suficiente. Tiene que haber una elección real de por lo menos dos cosas diferentes. Sin la habilidad y libertad de tomar una decisión moral, el pecado o la santidad no pueden existir.
Pongamos esto a prueba.
1. ¿Puede una roca pecar? No, no tiene conocimiento o elección libre.
2. ¿Puede un árbol pecar? No, de nuevo, no tiene conocimiento o elección libre.
3. ¿Puede una ballena pecar? Puede tener algo de conocimiento, pero aún no tiene elección moral.
Podemos seguir nombrando animales diferentes. Algunos tienen un grado más alto de inteligencia que otros, pero ninguno de ellos puede tomar una decisión moral libre. Dios creó al hombre con la habilidad de tomar una decisión moral libre. Esta habilidad de tomar una elección moral libre sólo puede venir de Dios, nunca podría evolucionar. Este hecho solo remueve toda posibilidad de que exista la evolución. Ningún animal tuvo, o tiene ahora, la habilidad y libertad de tomar una decisión moral.
¿Qué de una naturaleza de pecado?
Una naturaleza de pecado NO es un requerimiento para que el pecado o la santidad existan. Lucifer fue el ángel principal. No tenía naturaleza de pecado, pero se rebeló contra Dios. Adán y Eva no tenían pecado cuando pecaron. Antes de que pueda existir una naturaleza de pecado, tiene que llevarse a cabo el pecado. Además, un 1/3 de los ángeles se rebeló contra Dios sin tener naturaleza de pecado.
¿De dónde vino el pecado?
Isaías 14:12-15: "¡Cómo caíste del cielo, oh Lucero, hijo de la mañana! Cortado fuiste por tierra, tú que debilitabas a las naciones. Tú que decías en tu corazón: Subiré al cielo; en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte; sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante al Altísimo. Mas tú derribado eres hasta el Seol, a los lados del abismo" RVR1960.
El pecado no existía hasta que Lucifer se rebeló y se puso en contra de Dios. Es claro que Lucifer tenía conocimiento y libre albedrío que incluía la habilidad de tomar una decisión moral libre. La única razón de que existe el pecado es porque Lucifer lo creó cuando libremente tomó la decisión moral equivocada.
¿Creó Dios el pecado?
¡¡¡No!!! Dios creó un ángel que tenía la habilidad de tomar una elección moral libre. No había absolutamente nada malo con la forma en que Dios creó a Lucifer. Dios no fue responsable por lo que Lucifer libremente escogió hacer. Él fue creado con la habilidad de crear su propio carácter moral. Para ponerlo sencillamente, Lucifer creó su propio pecado por su libre albedrío.
Dios no puede ser responsable de la elección moral libre de cualquier ser.
Recuerden, el pecado o la santidad no pueden existir sin conocimiento y libre albedrío que incluye la habilidad de tomar una elección moral libre.
¿Puede Dios crear un ser moralmente pecaminoso o santo?
¡¡¡No!!! Es imposible que Dios cree el carácter moral en otro ser viviente. Él ha creado seres que tienen la habilidad de hacer su propio carácter moral, sea bueno o malo. Lo que cualquier ser viviente escoja hacer con su libre albedrío depende únicamente de él mismo solamente.
Cuando Dios creó a Adán, él no fue pecaminoso ni santo. A él se le dio la habilidad de hacer y formar su propio carácter moral. Sabemos que Adán tenía conocimiento y libre albedrío que incluía la habilidad de tomar una decisión moral libre. Adán y Eva crearon su propio pecado de su libre albedrío.
¿Qué es pecado?
El pecado es el resultado de una elección moral libre para rebelarse y desobedecer a Dios. En ambos de los casos de arriba, Adán y Lucifer escogieron libremente para rebelarse a sabiendas y totalmente desobedecer a Dios. En vez de dejar a Dios gobernar y reinar, escogieron tomar el control de sus propias vidas. El pecado es echar a Dios fuera de su lugar legítimo y entonces tomar Su lugar en la vida de uno. El pecado es más que un acto simple de desafío. Es un estado preferido del corazón. La única meta y propósito del pecador en la vida es darse a sí mismo placer, que totalmente ignora su propia inteligencia y el derecho de Dios para gobernar.
El pecado también es el mal uso de las habilidades y recursos con los que Dios nos creó. Dios no cometió ningún error en la creación de Lucifer o Adán. Ambos tomaron con lo que habían sido creados y lo usaron mal y por la razón equivocada.
¿Nace un bebé pecaminoso o perverso?
Pongamos esto a prueba. ¿Tiene un bebé conocimiento y libre albedrío que incluya la habilidad de tomar una elección moral? ¡No! Un bebé no tiene el conocimiento o la habilidad de tomar una elección moral libre. Cuando nace un bebé, es como Adán en el sentido de que ni es pecaminoso ni santo. En algún momento en el tiempo creará o formará su propio carácter moral por una elección moral libre. Un bebé no puede pecar o arrepentirse. Si un bebé muere, Dios no podría encontrar culpable al bebé de ningún pecado o delito. No hay absolutamente nada criminal o perverso en ningún bebé. Recuerden, el pecado es usar con lo que nacimos de una manera equivocada y por las razones equivocadas. El pecado no consiste en lo que tenemos, sino en nuestra elección moral libre para usar los recursos dados por Dios de manera equivocada.
¿Es el pecado normal o natural?
¡¡¡No!!! El pecado va en contra del diseño y propósitos originales de Dios. El pecado no sólo transgrede a Dios, sino también daña al que peca. No hay ningún defecto moral en la manera que nacemos. Pecamos cuando decidimos transgredir nuestro diseño y propósito originales. No hay nada absolutamente normal o natural sobre la rebelión contra Dios. De nuevo, el pecado es nuestra elección moral libre para usar los recursos dados por Dios de una manera incorrecta.
¿Perdieron Adán y sus descendientes la habilidad de obedecer a Dios luego del pecado de Adán?
¡¡¡No!!! La Biblia cuenta la historia de mucha gente, algunos que caminaron con Dios e hicieron lo que fue grato a Sus ojos, y otros que se rebelaron contra Dios e hicieron lo malo ante Sus ojos. Sería imposible rebelarse u obedecer sin la libertad para hacerlo.
Josué 24:15: "Y si mal os parece servir a Jehová, escogeos hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a Jehová" RVR1960.
Isaías 1:19-20: "Si quisiereis y oyereis, comeréis el bien de la tierra; si no quisiereis y fuereis rebeldes, seréis consumidos a espada; porque la boca de Jehová lo ha dicho" RVR1960.
Estos pasajes prueban que toda la descendencia de Adán aún tenía la habilidad de obedecer o rechazar a Dios.
¿Qué de Enoc que realmente obedececió los mandamientos de Dios? De nuevo, no sería posible obedecer a Dios si no tuviera esa habilidad.
Hechos 17:30: "Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan" RVR1960.
Dios no podría realmente ordenar a los hombres que se arrepintieran si ellos no tuvieran la habilidad natural para hacerlo.
¿Qué es una naturaleza de pecado y de dónde viene?
No se olvide que antes de que una naturaleza de pecado pueda existir, el pecado tiene que realizarse. De modo que una naturaleza de pecado es sólo el RESULTADO del pecado y no su CAUSA. Una naturaleza de pecado consiste en patrones de hábitos formados por el pecador que vive para sí mismo y no para Dios. Todo pecador es el autor de su propia naturaleza de pecado. Un pecador desarrolla su propia naturaleza de pecado en un periodo de tiempo. Comienza con sus pensamientos. Luego, sus pensamientos se vuelven elecciones. Luego, sus elecciones se vuelven acciones. Luego, sus acciones se vuelven hábitos. Entonces, sus hábitos se vuelven su estilo de vida.
¿Heredamos una naturaleza de pecado de Adán o nuestros padres?
¡¡¡No!!! Es imposible para que un carácter moral sea pasado de una generación a la siguiente. El pecado no existe hasta que de hecho uno peca. Léase Ezequiel 18. Ese capítulo enseña que el pecado no puede ser heredado o transmitido de los padres o ancestros. Cada persona es responsable de sus propias elecciones morales libres.
¿Cuándo se vuelve pecadora una persona?
Cuando un joven tiene suficiente conocimiento para tomar una decisión moral libre, peca entonces al escoger a sabiendas y deliberadamente su propio camino sobre el de Dios.
¿Nace un bebé espiritualmente muerto?
¡¡¡No!!! Algunos enseñan que un bebé nace espiritualmente muerto y no tiene más habilidad que un muerto tenga para agarrar un vaso de agua. De nuevo, el bebé no es pecaminoso ni santo. Cuando tenga suficiente conocimiento, se rebelará contra Dios y se separará de Él por sus propias acciones libres.
¿Qué realmente heredamos de Adán?
Todos heredamos muerte física y estamos sujetos a muchas enfermedades y debilidades. A esto se le llama depravación física. Esto no es la CAUSA de que cualquiera peque. Cristo mismo heredó esta depravación física pasada a Él por Su madre.
Hebreos 2:17: "Por lo cual debía ser en todo semejante a sus hermanos, para venir a ser misericordioso y fiel sumo sacerdote en lo que a Dios se refiere, para expiar los pecados del pueblo" RVR1960.
Hebreos 4:15: "Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado" RVR1960.
Sería imposible que Jesús fuera realmente tentado si Él no tuviera la posibilidad de pecar. Aunque Cristo tuvo que lidiar con ser humano, no pecó.
NO ES NINGÚN DELITO SER HUMANO. Dios no juzga o culpa a nadie por ser nacido humano. En su lugar, Él culpa al pecador por su propia elección libre de rebelarse contra Él.
¿Es el pecado una enfermedad o dolencia?
La dolencia o enfermedad nunca es la causa de pecado. Si el pecado fuera una enfermedad, el hombre podría curarlo médicamente. La vida de Cristo, Su muerte en la cruz y resurrección serían en vano.
¿De dónde vino el pecado?
Cada persona creó su propio pecado de una elección libre para oponerse al legítimo gobierno de Dios. Yo creé mi propio pecado y soy el único responsable de él. Ustedes crearon su propio pecado y también son los únicos responsables de él.
Cada persona forma su propio carácter moral, sea bueno o perverso. No existe hasta que es creado.
Dios completamente responsabiliza sólo por las propias elecciones, acciones y estilo de vida libres.
ÉSTA ES LA VERDADERA DOCTRINA DEL PECADO ORIGINAL. Mi pecado resulta de mi propia elección moral libre. Es verdaderamente mi propia creación.¿Qué es una mente carnal y de dónde viene?
La mente carnal no es la fuente o causa del pecado. Es el resultado del pecado. La única fuente real y verdadera de todo pecado es la voluntad propia libre y moral. La mente carnal es el resultado de la elección moral libre para rebelarse contra la recta autoridad de Dios. Esta elección deja fuera la vida, la presencia y el control de Dios. Es totalmente un estado voluntario donde el pecador elige vivir en completa rebelión contra Dios y Su carácter. La mente carnal es el enemigo total de Dios. Odia a Dios y es totalmente hostil a Él. La mente carnal rehúsa estar sujeta a la ley de Dios. Siempre y cuando el pecador se quede en su estado escogido, nunca será obediente a Dios y Sus leyes. El pecador totalmente rechaza la verdadera autoridad y se hace a sí mismo rey y gobernante de su propia vida. Transgrede el diseño y propósito originales de Dios para rechazar a Dios e ir en pos de la autocomplacencia. La mente carnal no es la mente en sí misma, sino una elección y preferencia voluntarias de la mente. Existe sólo como resultado de una elección moral libre. No es parte del cuerpo, alma y espíritu del hombre.
Nadie nace con una mente carnal o naturaleza de pecado. Esta enemistad contra Dios no es transferida de padre a hijo. Es imposible que un estado voluntario de la mente se pase de una generación a la siguiente. El pecado es el resultado directo de la libre elección de cada persona para vivir enteramente a la gratificación de sus deseos, concupiscencias, emociones y sentimientos.
¿Qué del capítulo 7 de Romanos donde Pablo habla del pecado que mora y el pecado que no puede evitar?
Aunque este capítulo fue escrito en primera persona del singular, NO podría ser la experiencia personal de Pablo cuando lo escribió. Cuando honestamente ustedes ven los capítulos 7 y 8 de Romanos, encontrarán que representan dos experiencias completamente y totalmente opuestas. El capítulo 7 es una experiencia, mientras que el capítulo 8 es la experiencia extrema opuesta. Es imposible que cualquiera tenga ambas experiencias opuestas al mismo tiempo. Esto sería como tratar de conducir al este y oeste al mismo tiempo. Se puede vivir en uno de esos estados por un periodo de tiempo, pero no se puede vivir en ambos al mismo tiempo.
El capítulo 7 de Romanos da el ejemplo de una persona que vive bajo la ley. Esta persona sabe lo que debe y no debe hacer. Realmente quiere obedecer la ley, pero se encuentra que mientras más duramente trata, más falla. Termina haciendo cosas que no tenía intención de hacer en lo absoluto. Después de muchos intentos de tratar de obedecer y continuamente fallar, llega la conclusión equivocada de que es imposible obedecer a Dios.
He aquí las razones por las que esta persona falla y luego piensa que le es imposible obedecer:
1. Está solamente confiando en sus esfuerzos y energía para ser libre él mismo. ¡Esto es IMPOSIBLE! Sólo Jesucristo puede salvar a una persona de su pecado. Si alguien podría verdaderamente salvarse a sí mismo, entonces la vida, muerte y resurrección de Cristo serían realmente sin sentido. Cualquier intento como éste siempre fallará sin importar cuánto esfuerzo se haga.
2. Su corazón o meta y dirección verdaderas es continuamente rechazar la autoridad verdadera y recta de Dios sobre él.
Es posible que esta persona haga cambios en su comportamiento por fuera, pero en su corazón permanece un enemigo total de Dios.
La elección de vivir totalmente libre de la autoridad de Dios se vuelve la ley de la vida del pecador. El Apóstol Pablo lo llama la ley en los miembros de uno que pelea contra la ley de la mente. Romanos 7:23: "pero veo otra ley en mis miembros, que se rebela contra la ley de mi mente, y que me lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis miembros".
Romanos 7:19-21 dice: "Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, eso hago. Y si hago lo que no quiero, ya no lo hago yo, sino el pecado que mora en mí. Así que, queriendo yo hacer el bien, hallo esta ley: que el mal está en mí".
Pablo conoce la solución verdadera a este problema cuando clama diciendo: "¡Miserable de mí! ¿quién me librará de este cuerpo de muerte? Gracias doy a Dios, por Jesucristo Señor nuestro".
Cristo mismo es la solución a este problema. Pablo continúa en el capítulo 8, que es su experiencia presente, cuando lo escribió, dando el ejemplo de una persona que está verdaderamente viviendo bajo la gracia del evangelio.
Romanos 8:1: "Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu".
Ésta es una declaración con condición. Si uno no anda conforme al espíritu, será condenado.
Es imposible que alguien ande conforme a la carne y conforme al espíritu al mismo tiempo.
Romanos 8:2: "Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte".
Es imposible ser libre de la ley del pecado y de la muerte y estar en servidumbre a ella al mismo tiempo. Lean Romanos 6:14: " Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia". También, Romanos 6:18: "libertados del pecado, vinisteis a ser siervos de la justicia".
Se tiene sólo dos estados posibles para vivir:
1. Vivir bajo la ley, andar conforme a la carne que sólo se fija en tener las cosas de la carne, es ser esclavo del pecado y de la muerte. La persona que vive en ese estado está continuamente rechazando la verdadera y recta autoridad de Dios, para sólo seguir estableciendo la suya. Este estado es el resultado del corazón de una persona, su meta o dirección supremas que ha escogido tomar. Ésta es la mente carnal, que es el enemigo verdadero de Dios. Siempre y cuando una persona permanezca en este estado elegido, nunca agradará a Dios o se sujetará a Él. (Romanos 8:7,8)
2. Vivir bajo la gracia. El que Cristo realmente nos ha liberado de nuestro pecado. Andamos conforme al espíritu. Como resultado, verdaderamente todos los días cumplimos la ley en pensamiento, palabra y obra.
Romanos 8:4-6: "para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Porque los que son de la carne piensan en las cosas de la carne; pero los que son del Espíritu, en las cosas del Espíritu. Porque el ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del Espíritu es vida y paz".
De nuevo, es imposible ocuparse de las cosas de la carne y de las cosas del espíritu al mismo tiempo.
Muchos afirman estar viviendo bajo la gracia, pero continúan viviendo en pecado y rebelión a Dios. Esta gente está engañada. La Biblia no nos enseña que cualquiera puede seguir en pecado y ser libre del pecado al mismo tiempo. Cuando una persona está realmente viviendo bajo la verdadera gracia, de hecho guardará los mandamientos de Dios y practicará la santidad. Véase: 1 Juan 3:6-10, 1 Juan 2:29, 1 Juan 2:3-5, 1 Juan 5:2-3 y 1 Juan 3:2-8.
Incluso Cristo dijo que si de veras lo amamos, guardaremos sus mandamientos.
Juan 14:15, 21a, 24: "Si me amáis, guardaréis mis mandamientos. El que tiene mis mandamientos y los guarda, ese es el que me ama... El que no me ama, no guarda mis palabras". LBLA
La única VERDADERA CAUSA de todo pecado, maldad, mente carnal, ocuparse de la carne y el pecado que mora resulta de una elección moral libre. Éstas son todas las creaciones del pecador. Nadie nace con ninguna de éstas y sólo existen hasta que el pecado se realiza.
¿Qué del salmo 51?
Mucha gente cree que nacemos en pecado porque David dijo en el salmo 51: "He aquí, en maldad he sido formado, Y en pecado me concibió mi madre".
Este pasaje es poético y figurativo. En el versículo 7 dice: "Purifícame con hisopo, y seré limpio". Nadie será limpio del pecado con hisopos.
Incluso si ven este versículo literalmente, David parece estarse refiriendo al pecado de su madre, no al estado en el que nació él. La madre de David es el sujeto del pecado. Hay una gran diferencia entre ser formado en iniquidad y la iniquidad ser formada en ustedes. Por ejemplo, Yo nací en Seattle, pero Seattle no nació en mí. Este versículo no enseña que David nació en pecado, o que el pecado fue transmitido a David por su madre.
¿Qué de Romanos 5:19?
Romanos 5:19: " Porque así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos".
Vean con cuidado este versículo. Si el pecado de Adán hizo pecadora a toda la humanidad, entonces la obediencia de Cristo hizo justos a todos. Las palabras son exactamente las mismas. Lo que es cierto de Adán, debe ser cierto también de Cristo; no hay otra posibilidad. Si creen que el pecado de Adán hizo pecaminosos a otros, entonces tienen que creer que Cristo hizo justos a otros, pero no hay elección libre en ningún caso. Esto es universalismo puro. Todos serán salvos sin importar nada. Si no tenemos elección en ser hechos un pecador, entonces no tenemos elección en ser hechos justos.
Es cierto que todos moriremos físicamente como resultado del pecado de Adán, pero nuestro libre albedrío es lo que determina nuestro destino eterno.
De nuevo, la Biblia enseña que el pecado es una elección moral incorrecta.
El significado de las palabras griegas y hebreas originales usadas en las escrituras para describir al pecado son:
1. Actuar perversamente, torcer, distorsionar.
2. Ser neciamente desobediente.
3. Rehusar servir a Dios.
4. Actuar alevosamente y desobedecer.
5. Ser rebelde y rechazar hacer lo correcto.
6. Estar sin ley y rehusar reformarse.
7. Ser obstinado e insumiso.
8. Desviarse de la derecha.
9. Ser impío e injusto.
Cuando examinan la Biblia entera, verán una historia de mucha gente necia, rebelde insolente, orgullosa, arrogante y desobediente. Ninguno nació así. Tienen la habilidad de seguir a Dios y hacer cosas gratas a sus ojos, pero libremente escogen escupir en el rostro de Dios.
La responsabilidad por el pecado.
Nadie puede verdaderamente arrepentirse si no creen que son responsables de su pecado. Mientras una persona culpe a sus padres, Adán, su condición física, Dios, al diablo o lo que sea, nunca realmente se arrepentirán. Una persona debe ver y darse cuenta de que su pecado ciertamente es su propia creación. El pecador debe darse cuenta de que ha escogido rebelarse y rehusar la recta autoridad de Dios sobre él. Ha voluntariamente puesto su corazón contra Dios para vivir entera y solamente para sí mismo. Ésta es la condición verdadera del pecador. No es una víctima nacida en un estado pecaminoso en el que no tiene absolutamente control sobre el pecado. ¡Los pecadores no merecen lástima o simpatía para nada! Son criminales que escogieron luchar contra Dios. ¿Castigará Dios a los pecadores por algo que realmente no es su propia culpa?